Hoy es uno de esos días en los que una isla desierta te parece la cuna del hacinamiento. En estos días mi terapia es sumergirme en el centro de Madrid, buscar la calle en la que la marea de personas sea más densa, bucear en ella, caminar muy despacio, todo lo despacio que pueda sin llegar a pararme, y sentir cómo las personas me adelantan en todas las diagonales. Como la vida me adelanta.
Hoy es uno de esos días en los que te preguntas por qué la gente conocida te saluda al pasar. Si no saben mi nombre por qué me dicen hola. Ayer les saludaba yo y mañana también lo haré. Y eso acrecienta mi malhumor.
Hoy es uno de esos días en los que, por ósmosis, se me ha ido metiendo la almohada en el cráneo durante toda la noche, desplazando el cerebro a un mínimo rincón. Me he despertado con esa sensación de tener la masa gris algodonada, que me hace ver todo con una textura de neblina plúmbea que amenaza con condensarse tanto que huele a perpetuidad.
Hoy es uno de esos días en los que del bolígrafo no sale tinta. Sale algo que se le parece mucho, no lo discuto, pero no dibuja el papel, sino que lo emborrona y hace que la papelera rebose de gurruños de papel que probablemente acabarán reciclados en gruesas guías de teléfono.
Hoy es uno de esos días en los que sé que no puedo hacer precisamente lo único que deseo hacer en uno de esos días como hoy, que es coger el teléfono, que es correr hacia allí, que es dejar pasar el tiempo sin perderlo. En un banco, en un portal, calle arriba, calle abajo...
Hoy es uno de esos días en los que deseas que llegue mañana. Cuanto antes.
Hoy es uno de esos días en los que te preguntas por qué la gente conocida te saluda al pasar. Si no saben mi nombre por qué me dicen hola. Ayer les saludaba yo y mañana también lo haré. Y eso acrecienta mi malhumor.
Hoy es uno de esos días en los que, por ósmosis, se me ha ido metiendo la almohada en el cráneo durante toda la noche, desplazando el cerebro a un mínimo rincón. Me he despertado con esa sensación de tener la masa gris algodonada, que me hace ver todo con una textura de neblina plúmbea que amenaza con condensarse tanto que huele a perpetuidad.
Hoy es uno de esos días en los que del bolígrafo no sale tinta. Sale algo que se le parece mucho, no lo discuto, pero no dibuja el papel, sino que lo emborrona y hace que la papelera rebose de gurruños de papel que probablemente acabarán reciclados en gruesas guías de teléfono.
Hoy es uno de esos días en los que sé que no puedo hacer precisamente lo único que deseo hacer en uno de esos días como hoy, que es coger el teléfono, que es correr hacia allí, que es dejar pasar el tiempo sin perderlo. En un banco, en un portal, calle arriba, calle abajo...
Hoy es uno de esos días en los que deseas que llegue mañana. Cuanto antes.
14 comentarios:
Yo esos dias me escapo (si puedo) y me veo una matinal de cine en La vaguada o cinecitte, me evado un par de horas en una peli y al salir compruebo si esa sensación ha desaparecido o no.
Joe Mariano, si en tus perores días escribes cosas como " Me he despertado con esa sensación de tener la masa gris algodonada, que me hace ver todo con una textura de neblina plúmbea que amenaza con condensarse tanto que huele a perpetuidad." , pues no se qué decirte..... que eres un jodio quejica como diría Rodros XDD.
Por cierto Joako, anda que no me he visto yo matinales en la vaguada de más joven XDD. Recuerdo ver Fight Club yo sola a las 11 de la mañana con una bolsa de conguitos XDD.
Wen ¡es uno de mis placeres secretos!
¡VER UNA PELICULA TU SOLO EN UN CINE!
cuando lo logro me encanta, y encima es MAS BARATO
Mal día para la melancolía, Mariano. Si lo que quieres es perderte entre la gente vente para Barna. Madre...
¿Has probado a quitarle la tapita? Al boli, digo. Bueno, eso si se trata de un Bic (Bic, bic,bic) Si no, hay que darle a un botoncito y sale la punta. La punta del booooooli.
Mañana estarás muerto.
se intuye un acontecimiento
jajajaja, me parto con Estili, jajajajajajaja.
Ay, Mariano, qué sinvivir, rey.
Mira, vente pa' mi casa, que tengo aquí unas 120 páginas todavía por revisar para el lunes.
¿Qué me dices?
Yo creo que se te quitaría el algodón ese de la cabeza en un pis pás.
:P
Ánimo, guapetón.
Zurdo, intentaremos en un ratito que hoy no sea uno de esos días...con todas nuestras fuerzas eh?
Cuídate guapo...
¡Uy! Conozco esa sensación... La sugerencia de Joako puede funcionar, la de Irreverens no sé yo, mejor vente para acá. Prometo una buena cena, cervezas varias para probar, un buen vino si es eso lo que se te antoja, menú a elegir y música después. No vale pensar mucho, sólo dejarse llevar y dejarse entretener. ¿Algo más?
Bueno pues Mariano... ya solo queda una hora para aguantar este asqueroso dia si?
Ánimo
Besicos
Hoy ya es mañana. Espero que te sientas un poquito mejor. No sé qué decirte, y eso que sabes que te entiendo perfectamente. Tan perfectamente, que hoy, yo soy tú ayer.
Un super abrazo.
¿Habré coincidido contigo en este día? ¿Fnac? ¿Casa del Libro? Aun así yo estuve emborronando mi libreta por todo el centro de Madrid.
Buff, que digo yo que a estas alturas despues de tantos mañanas ya no tiene mucho sentido esto, pero de todos modos...
REMEDIOS PARA LOS DIAS EN QUE UNA ISLA DESIERTA PARECE LA CUNA DEL HACINAMIENTO
1. Ve a la biblioteca. Pasa la tarde caminando entre estanterias llenas de libros, cogiendolos, ojeandolos, manoseandolos y, por supuesto, leyendolos.
2. Ve a un parque. Sientate. Relajate.
3. Coche. Carretera y manta
4. Mimate. Date un capricho. Ve a un concierto. Date un masaje. Comprate una camisa, un libro, un cd...
5. Duerme. Dormir siempre lo arregla todo.
Publicar un comentario