A las barricadas pacíficas

Varias personas que leen mi blog, que yo no sabía que lo hacían porque no comentan en él ni me lo habían comentado a mí, me han recomendado amablemente que no hable de política, que aburro, que se me ve el plumero y que voy a perder lectores. Puede que aburra, no me compete a mí hacer ese tipo de valoraciones. ¿Tendencioso? Si la defensa de los valores en los que creo me hace serlo, pues estupendo. Zurdo, rojo y tendencioso. Pues tampoco suena tan mal, ¿no? ¿Que pierdo lectores? No me preocupa lo más mínimo. No escribo para crear adeptos ni para liderar el ranking bloguero. Iba a decir para qué escribo, pero es que no hay más razón que escribir en sí mismo. No pretendo sentar cátedra. No me creo en posesión de la verdad ni de la mentira absoluta. No milito en ningún partido y no haré campaña por ninguno. Será raro que me veáis alistado bajo alguna bandera (pagaré el canon correspondiente por esta frase a Olvidado y a Drexler).

Últimamente he estado ocupado en cosas más interesantes que la política (como diría Clandestino, en vivir y follar y, yo añado, escribir) y así seguirá siendo, pero seguiré sin callarme cuando toque. No me callaré cuando la conferencia episcopal y el vaticano quieran confundir fe y ley, cuando desde su púlpito pretendan injerir en la vida civil y social. No me callaré cuando alguien se apropie conceptos como el de familia, cuando el maniqueísmo beato intente imponer su visión del bien y del mal. No me callaré ante discursos apocalípticos como el interpretado ayer por el señor Aznar. No apelaré al hombre o la mujer de estado que debería de ser cualquier ex-presidente. Basta recordar sus acciones para repudiar su actual discurso. No me callaré ante un gobierno blando que se queda a medio camino en casi todo lo que aborda. Y no lo haré, no me callaré para que no se me abra la úlcera, porque si no se libera la válvula de la olla exprés estalla y, básicamente, porque no me da la gana.
Opino desde mi firme posición laica y republicana, y seguiré haciéndolo con libertad, independencia y desde el respeto (sin ánimo de ofender pero sin miedo a hacerlo, porque no me duele en prendas pedir perdón si me equivoco), abierto al debate y al aprendizaje, y siempre desde éstas, mis barricadas pacíficas.

Soneto triplemente estrambótico para Aznar

Ahora que te manejas en extranjero,
que asesoras a comunicadores y banqueros,
¿añoras jugar a indios y vaqueros,
o te alivia hacer budú con Zapatero?

Ahora que trabajas en lo privado,
que conferencias en sitios de postín,
que Rato os abandona por Botín,
¿mantendrás que eres político retirado?

¿Será Botella la Hillary siguiente?
¿Podrá romper la Esperanza de Rajoy
y sucederte a ti como presidente?

Tu amigo Pizarro diputado, ¡qué sorpresa!,
¿no decíais hace poco indignados
que el gobierno politizaba contra Endesa?

¿Contemplas con los pies sobre la mesa,
tranquilo los atentados en Irak?
¿Duermes bien o mal?, confiesa.

Prohíbe el preservativo el Vaticano,
tienes dos hijos, se te ve lozano,
o has follado poco o eres mal cristiano...

Lo que era Movimiento de Liberación vasco,
ahora es Zapatero empuñando la metralleta,
te escuché ayer, y sinceramente, me dio asco.