No son pocas las veces que he comentado en este blog y, sobre todo, fuera de él, lo difícil que resulta a veces manejar la personalidad múltiple en la que navego últimamente. Más, si cabe, cuando esa personalidad se multiplica en espejos. Joder, cada día estoy más críptico… Quiero decir que es más complicado aún cuando uno está a ambos lados del espejo. ¿A que ya ha quedado mucho más claro? ¿Que no? Grrrr. A ver, que digo que es muy jodido a veces tener la cabeza dividida, con un hemisferio dedicado a editar y con el otro dedicado a escribir. Por épocas, casi imposible.
Estas últimas semanas parece que lo voy consiguiendo. Aunque el hemisferio editor sigue siendo diez veces más grande que el hemisferio escritor, estos días estoy logrando escribir algunas líneas. Y esto es gracias a varias circunstancias/personas: alguna editora/coordinadora que me espolea, algunas amigas que me animan constantemente, una musa persistente que quiere ser la premio nobel consorte de literatura…
También he comentado mucho, y recientemente, que hay lecturas que me provocan la escritura. Esta vez mi labor de editor se ha aliado con mi vocación de escritor, ya que los dos últimos libros que hemos editado me han dado muchísimas ganas de escribir. Creo que si alguna vez los leéis, lo entenderéis.
Aunque suene a publicidad (y lo es), os recomiendo los libros de estos dos cuentistas de tomo y lomo, Alberto de Frutos y Manuel Espada. Son dos magníficos escritores a los que les une una calidad literaria indiscutible (y ya tengo los guantes de boxeo calados para “dialogar” con cualquiera al respecto) y una manera de enfrentarse a la literatura similar. Ya quisiera para mí la humildad de ambos. No perdáis de vista estos nombres, porque estoy convencido de que tarde o temprano publicarán en editoriales importantes. Y entonces pondré voz de abuelo cebolleta y, orgulloso, diré que los descubrimos nosotros. Os dejo los links a sus libros para que cotilleéis tranquilamente:
Y después de recomendaros buenas lecturas os abandono, que voy a aprovechar que la librería está desértica para rematar un relato que me tiene loco y para seguir con mi novela.
Un abrazo zurdo para todos y todas.
14 comentarios:
El de Alberto de Frutos ya lo tengo.
A Manuel,(me alegra que le hayas editado) hace más de dos años que le leo; nos conocimos en Madrid, me gustó mucho su manera de "estar", cuando llegué, me señaló con el dedo y dijo...tú ...tú...tú eres Mita...Es muy agradable, aunque llegó a la lectura de su micro, sin libro. Yo tenía Velas al viento y se lo presté, pero por unos segundos -mientras él se preguntaba en qué pg. estaría su relato- me hizo "feliz" con la sonrisa de niño díscolo que desplegó al oírme decir: 309.
Los escritores encuentran satisfacción en cualquier nimio detalle que tenga que ver con sus obras.
Como diría JM -y ya te comenté-: Lo único que un escritor en verdad necesita son halagos.
Y con respecto a lo que comentas sobre las editoriales, repites un pensamiento asentado durante siglos: "yo le descubrí -y soy pequeño- y después le publicaron sus obras en una gran editorial."
Pero hay una vertiente opuesta, las editoriales no son grandes, los escritores las hacen grandes.
Por eso no hay que olvidarse de la fuerza que un grupo de gente creativa unido y elegidos con cuidado, puede desplegar.
Besitos
Espero volver a Madrid y visitar tu librería y traerme lecturas que inspiren!!
abrazos
L;)
¿Y en qué faceta de las dos eres Jekill o Mr Hide?
Sonrío.
No tengo el gusto de conocer la obra de Alberto. La de Manu la conozco, y es muy buena.
Pondré remedio a la primero.
Lo segundo, gracias a Dios, no tiene remedio.
:)
Te sales, lo sabes...
besicos
Gracias por tus palabras Mariano, son todo un estímulo para seguir escribiendo. Y de pequeños nada. Policarbonados, sois muy grandes, y estoy feliz porque me hayáis publicado vosotros. Un abrazo.
Manu
Te repito la pregunta de Raúl. (Juas)
Enhorabuena por los dos nuevos retoños. Imagino que irás encontrando el equilibrio entre las dos facetas, ¿no? Ya nos contarás de qué manera una influye en la otra...
Un besote.
Qué perdida estoy, madre mía.
Vais muy rápido o yo muy lenta.
Lo segundo, seguro.
Ya quisieran los escritores que dicen que publican con eso que llaman "las editoriales grandes" recibir el cuidado, la atención, el respeto y hasta el mimo que recibimos en Policarbonados.
Dicho sea sin ánimo de señalar...
Yo aún no tengo ninguno pero todo se andará.
Mariano el multicelular con coleta.
Como pares de escribir te vas a enterar.
Aquí una autora pequeña a quien vosotros estáis haciendo un poco más grande
Un hemisferio editor, otro escritor. ¿Lees en voz alta los cuentos de amigas con el cerebelo?
Te envio un cordial saludo, después de volver a disfrutar dr tu blog. Nos ciberconocimos hace un par o tres de años por el show de los Premios blogs 20minutos. Desde entonces, procuro seguirte.
Pues nada habrá que pasarse un día por esa librería...
un saludo
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