20 de febrero de 2010

Hasta siempre Ariel...

El 4 de ocubre de 2009 moría Mercedes Sosa y mi pequeño homenaje fue poner este vídeo de ella cantando "Alfonsina y el mar". Ahora ha muerto Ariel Ramirez, el compositor de esa canción, una de las más bellas escritas en castellano y muy ligada a mis noches de parranda. Vuelvo a poner la misma canción como homenaje a Ariel. De las miles de versiones que se han hecho de esta canción, estoy seguro de que entre las preferidas del compositor estaba la de la Negra.

Con un nudo en mi garganta,
con la piel de tu garganta...


11 comentarios:

Juan Duque Oliva dijo...

QDP

Wen dijo...

Jo, menuda mañana de sábado me estáis dando entre jove y tu..... ufff...

Alena.Collar dijo...

Lo lamento. Significó un montón de cosas esa canción. Y más habiendo leído a Alfonsina Storni. Una mujer tan desolada...
Hay una edición de su poesía completa, que no desdice de la canción que la hicieron.
Se nos mueren los que ya eran inmortales...

Nando Bonatto dijo...

Gran musico Ariel, su obra maestra
La Misa Criolla acompañara a los argentino
http://www.youtube.com/watch?v=TKkoT5ZoMA0&feature=relateds

Anónimo dijo...

Sí, Storni, Pizarnik, Lispector...
No desdicen,no.

Dónde está Jove? Lo he perdido de vista...
Besos

Nando Bonatto dijo...

FRENTE AL MAR

Oh mar, enorme mar, corazón fiero
De ritmo desigual, corazón malo,
Yo soy más blanda que ese pobre palo
Que se pudre en tus ondas prisionero.

Oh mar, dame tu cólera tremenda,
Yo me pasé la vida perdonando,
Porque entendía, mar, yo me fui dando:
"Piedad, piedad para el que más ofenda".

Vulgaridad, vulgaridad me acosa.
Ah, me han comprado la ciudad y el hombre.
Hazme tener tu cólera sin nombre:
Ya me fatiga esta misión de rosa.

¿Ves al vulgar? Ese vulgar me apena,
Me falta el aire y donde falta quedo,
Quisiera no entender, pero no puedo:
Es la vulgaridad que me envenena.

Me empobrecí porque entender abruma,
Me empobrecí porque entender sofoca,
¡Bendecida la fuerza de la roca!
Yo tengo el corazón como la espuma.

Mar, yo soñaba ser como tú eres,
Allá en las tardes que la vida mía
Bajo las horas cálidas se abría...
Ah, yo soñaba ser como tú eres.

Mírame aquí, pequeña, miserable,
Todo dolor me vence, todo sueño;
Mar, dame, dame el inefable empeño
De tornarme soberbia, inalcanzable.

Dame tu sal, tu yodo, tu fiereza,
¡Aire de mar!... ¡Oh tempestad, oh enojo!
Desdichada de mí, soy un abrojo,
Y muero, mar, sucumbo en mi pobreza.

Y el alma mía es como el mar, es eso,
Ah, la ciudad la pudre y equivoca
Pequeña vida que dolor provoca,
¡Que pueda libertarme de su peso!

Vuele mi empeño, mi esperanza vuele...
La vida mía debió ser horrible,
Debió ser una arteria incontenible
Y apenas es cicatriz que siempre duele


AHI FUE ALGO DE ALFONSINA
LA POETISA QUE FUE A LA BUSQUEDA DE SU FINAL EN LA CIUDAD MARINERA QUE HABITO

Anónimo dijo...

Entonces conoces el monumento!!!!
¿Le pones una flor de mi parte?
Buscando su horizonte, debajo de las olas del mar.

Nando Bonatto dijo...

http://www.lacapitalmdp.com/imagenes/5799.jpg

el mar en tormenta justo donde termino Alfonsina
este invierno pasado

Anónimo dijo...

Gracias!!
Muac!

Jesus García L. dijo...

Precioso homenaje, preciosa canción y preciosos versos.

Con tu permiso me uno a ti.

Un saludo
Jesús

Anónimo dijo...

Quisiera esta tarde divina de octubre
pasear por la orilla lejana del mar;
que la arena de oro, y las aguas verdes,
y los cielos puros me vieran pasar.

Ser alta, soberbia, perfecta, quisiera,
como una romana, para concordar
con las grandes olas, y las rocas muertas
y las anchas playas que ciñen el mar.

Con el paso lento, y los ojos fríos
y la boca muda, dejarme llevar;
ver cómo se rompen las olas azules
contra los granitos y no parpadear;
ver cómo las aves rapaces se comen
los peces pequeños y no despertar;
pensar que pudieran las frágiles barcas
hundirse en las aguas y no suspirar;
ver que se adelanta, la garganta al aire,
el hombre más bello, no desear amar...

Perder la mirada, distraídamente,
perderla y que nunca la vuelva a encontrar:
y, figura erguida, entre cielo y playa,
sentirme el OLVIDO PERENNE DEL MAR.